El día para los apellinados comenzó a las 7:30 horas. Los guías despertaron a los niños con una canción, se ducharon y, cuando estuvieron listos, se reunieron afuera de sus habitaciones para realizar una dinámica de activación.
Luego, los tres 4éme llegaron hasta el potrero y participaron de una significativa actividad: abrazos gratis, poniendo en práctica lo aprendido la noche anterior.
Ya cargados de energía, los apellinados se acercaron a los comedores para tomar un rico desayuno y así poder enfrentar los desafíos del día. Se separaron por equipos y cada uno de ellos vivió diferentes experiencias: Subida al Risco, Puente Tibetano, Muro Liso, entre otras. Al terminar lo dispuesto para la mañana de este miércoles, los apellinados disfrutaron de un rico almuerzo. Por la tarde los grupos rotaron en sus actividades, con el objetivo de que todos experimenten los desafíos propuestos.
Cansados, pero muy contentos, los alumnos llegaron a la hora de la cena, comentando todo lo vivido durante el día. Para finalizar la jornada se llevó a cabo un juego nocturno, en el que todos los apellinados participaron de forma entusiasta. Llegó la hora de ir a dormir, los alumnos se alistan para ir a descansar y así poder recargar pilas para vivir un nuevo día en Los Pellines.
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